28 octubre 2012

in memoriam

Hoy me enteré de que el lunes por la noche murió Rodolfo Sánchez. Uno de los mejores percusionistas del folklore argentino.
La primera vez que lo escuché, en aquel excelente trío con Carnota y Spinasi, sentí que a nadie había escuchado tocar tan bella y sutilmente un bombo. Nunca hizo pirotecnia, pero su toque fue un lujo. Alguien dijo por ahí que era como el aire: sutil, invisible, te das cuenta que es vital cuando falta. 
Me da mucha pena su muerte, cruelmente prematura. Se siguen yendo grandes músicos, y otra vez pienso que el de arriba, si existe, se está armando un seleccionado de puta madre.


No hay comentarios.: